DISEÑOS DE SALAS: PRINCIPALES TIPOLOGÍAS
No exageraremos al decir que el correcto diseño de la sala de Audición es de vital importancia para poder proporcionar una correcta reproducción. Tanto para conseguir un equilibrio tonal adecuado, como una buena amplitud escénica y correcta escena sonora.
A nivel práctico, imaginemos que estamos escuchando una voz solista en nuestra Sala de Audición y que cuando ésta se registró a cierta distancia del cantante había una superficie reflectante. El sonido de la voz rebota en esa superficie y regresa al micrófono con un pequeño retardo de tiempo y con un nivel inferior.
Si en nuestra sala de Audición tenemos superficies reflectantes a menor distancia que la del estudio al micro, ésta nos producirá una reflexión con un retardo inferior.
Así pues, si ésta última es suficientemente fuerte, nos va a enmascarar la reflexión del estudio, con lo que no estaremos oyendo la acústica del estudio sino la de nuestra sala de audición y por lo tanto no estaremos reproduciendo correctamente la escena sonora.
A continuación describiremos las dos principales tendencias en el diseño de acústica de salas.
SALA LEDE
En 1978 Don Davis introdujo un nuevo diseño de salas y un método para el tratamiento acústico. La parte posterior de la sala la convirtió en una superficie muy reflectante y la parte anterior en muy absorbente. Con ello consiguió que se recibieran en el punto de escucha muchas primeras reflexiones ("rebotes" en la pared trasera) y muy pocas de orden superior ("rebote "pared trasera + "rebote" pared delantera"). Inicialmente la solución más simple para evitar las reflexiones de la pared frontal, fue hacer esta parte muy absorbente.
A mediados de los 80 Peter D' Antonio y John H. Konnet, mejoran el concepto LEDE al aplicar los avances realizados por M.R. Schröder en materia de difusión y prescindir del frontal absorbente gracias a su concepto de zona sin reflexiones (RFZ). La anulación de primeras reflexiones se consigue ahora dando al frontal de la sala de control una forma geométrica tal que las posibles primeras reflexiones son enviadas directamente hacia la pared trasera, donde son "troceadas" por los difusores acústicos de alta eficiencia ideados por Schröder.
Este diseño crea la sensación auditiva de que los monitores son la única fuente de sonido existente. Debido a que a las reflexiones superiores se les reduce considerablemente el retardo en la parte frontal obteniendo un sonido muy limpio.
Davis sugería que la posición de escucha sea de 2,5 a 3 metros desde los monitores, y éstos, separados uno del otro entre 3 y 3,5 metros.
Las salas LEDE están diseñadas según algunos aspectos psicoacústicos como es el efecto preferencia o Hass. En el diseño de éstas salas la geometría se construye para que se produzca una zona libre de primeras reflexiones en la zona de escucha. La idea principal es tener un sonido directo de los altavoces y permitir un intervalo de tiempo entre las reflexiones de la sala. La pared posterior se construye de tipo reverberarte, permitiendo una escucha "viva", evitando la posible coloración. Este tipo de diseños evita las fuertes reflexiones y proporciona una respuesta general de la sala plana y libre de irregularidades.
El sonido difuso que llega al oyente desde la parte trasera de la sala no suena como eco, porque se recibe dentro de la zona de fusión de Haas y el oyente tiene entonces la impresión de estar en un recinto mayor. Se comprobó experimentalmente que las reflexiones con gran intensidad encontradas en algunas salas de audición no permiten una precisa percepción de la imagen sonora. La imagen sonora puede crecer hasta en 3.8 veces si corregimos las reflexiones de alta amplitud y es especialmente significativo para voces.
Non-Environment
El concepto Non-Environment fue desarrollado por Tom Hidley a mediados de los 80. Su proyecto consistía en una sala semianecoica con una pared reflectante para que soporte los altavoces (a modo de pantalla infinita), con ello se ha conseguido que, el factor Q de los nodos en baja frecuencia sea tan ancho que desaparece y que la respuesta tonal de la sala sea más uniforme. La pared rígida que soporta los altavoces es necesaria para una correcta radiación hemisférica de los altavoces. Para evitar la excesiva utilización de absorbentes acústicos, se usa un sistema de guía de ondas, consistente en colocar los paneles alineados en la dirección de propagación. La principal ventaja es que en las salas diferentes pero con estas características una misma grabación suena exactamente igual.
MATERIALES DE ACONDICIONAMIENTO ACUSTICO
Absorbentes acústicos. Elementos de acústica variable
Cuando se construye sala para un fin específico, como por ejemplo exclusivamente para audición de música clásica, se puede diseñar con cierta precisión buscando los materiales de acondicionamiento acústico más adecuados para este uso. Pero normalmente se construyen salas multiusos (Clásica, Pop, Rock,...incluso Home Cinema). Cada uno de estos estilos musicales, o incluso usos, precisa de unos parámetros acústicos diferentes (sobre todo en cuanto a Tiempo de Reverberación) por lo tanto es necesario disponer de un sistema que permita variar a voluntad las condiciones acústicas de la sala en función del tipo de música o uso que se le desee dar a la sala.
Con este tipo de materiales conseguiremos obtener un equilibrio tonal adecuado, sin coloraciones provocadas por la sala. Lo que se traduce en una mejor definición de los timbres (al quedar el sonido "mas limpio"), y voces más claras.
Cortinas
El efecto que se consigue con este diseño es el de tener un bajo tiempo de reverberación cuando las cortinas están cerradas y un tiempo de reverberación alto cuando están abiertas, pudiendo tener valores intermedios cuando las cortinas están a medio cerrar.
Configuración de un sistema de cortinas para modificar el Tiempo de Reverberación
Para que este sistema sea efectivo, se debe trabajar con cortinas cuyo coeficiente de absorción haya sido ensayado en laboratorio. El otro factor de influencia, junto al coeficiente de absorción, será el vuelo o "fruncido" que tenga la cortina.
Paneles móviles:
Es una alternativa muy versátil. Se utilizan para variar el comportamiento acústico de alguna área específica. Son muy útiles para grabar voces, donde estos se ubican alrededor del locutor o cantante para "secar" esa zona del estudio. También, con estos paneles, es posible aislar acústicamente varias zonas dentro de un estudio cuando se necesitan grabar varias fuentes sonoras simultáneamente.
Otra utilidad de gran interés, es cuando no se puede ejecutar una instalación fija (por ejemplo un salón domestico). Con estos paneles ("de quita y pon") podemos acondicionar acústicamente una sala mientras realizamos la escucha, y una vez finalizada, se recogen y pueden guardarse cómodamente.